por: Dante E. Zegarra López
Subdirector del diario "Arequipa al día"
Desde los
albores del reporterismo en Europa, cuando las noticias se transmitían en
curiosas relaciones manuscritas, hasta nuestros días en que la informática ha
invadido todos los campos de gestión y producción de nuestras vidas, la
tecnología y el periodismo han ido de la
mano. Así ha sido en el pasado y seguirá ocurriendo en el futuro, aunque con
mayor vértigo.
La tecnología
gráfica, la tecnología de las comunicaciones y la tecnología de la informática,
han ido marcando, con su paso y su desarrollo, el paso y desarrollo del
periodismo, que por ahora sigue fiel a su origen y destino, de hacer conocer
los sucesos y ocurrencias en un ámbito geográfico determinado. Ahora asistimos
y somos actores de un periodismo rápido y de dinámica transformación, en medio
de un mundo que se reduce más a cada
instante.
La tecnología,
que modifica puestos de trabajo y procesos laborales, acelera el intercambio
permanente de informaciones. Por ejemplo, ya no se necesitan boceteadores y,
los diagramadores no requieren de lápiz
y papel, pues su trabajo lo hacen en un ordenador, pareciéndose más a la labor
que antaño hacían los confeccionistas de talleres; los propios redactores
reemplazan a los linotipistas y el desarrollo de fotografías está
desapareciendo con los equipos digitales.
La presencia de
Internet en el mercado informativo plantea nuevos desafíos. Los periódicos
digitales se distancian poco a poco de los editados en papel, que siempre son
versión del día anterior. Poco a poco esos diarios digitales recorren el camino
del "on line" y brindan servicios especiales.
Estas mismas
circunstancias obligan necesariamente a una reformulación de la práctica del
periodismo en términos de oferta requerida y necesaria por y para el usuario.
Bajo esa óptica, una análisis de contenidos plantea, con demasiada frecuencia,
que el único principio de programación sería el "todo vale" para
incrementar el rating o la tirada.
Obviamente que las
preferencias del usuario son una variable que en el periodismo, como en
cualquier sector económico, no se puede ni se debe soslayar o ignorar, sin
arriesgarse a desaparecer del mercado.
Esto, a veces,
obliga a una nivelación hacia abajo, que necesariamente generará consecuencias
devastadoras, incluso en contra del propio medio.
En medio de las
tormentosas aguas que la tecnología arrastra, al periodismo no le queda otra
tabla de salvación, según mi humano entender, que elaborar un perfil que tenga
como eje clave la credibilidad, pues al fin y al cabo existe ya demasiada
información que circula en una margen y
en otra. Esto mismo enfrenta al usuario
a un criterio de confiabilidad de las fuentes. Y esto que podría ser una receta
del baúl de la abuela, es tan válida para el periodismo escrito, radial,
televisivo o electrónico.
Pero estos
problemas acrecentados por la tecnología, que muy de refilón tratamos en estas
líneas, nos llevan a reexaminar la responsabilidad que tienen los medios en una
sociedad informática, como en la que ya estamos inmersos.
Si los problemas
se plantean en gran medida para los medios tradicionales, otro tanto surgen en
los de la nueva generación y es que de pronto, la magia especial que se creía
ver en el nuevo medio electrónico, se esfuma, no es la misma de hace cuatro
años.
Como señalaba
líneas arriba, el Internet requiere del
periodismo que maneje un contenido diferente al que estamos acostumbrados,
pero, según entiendo. con un redoblado esfuerzo por lograr y mantener la
credibilidad. La misma estructura del medio electrónico, pues su lectura no es
lineal, sino mucho más flexible por
aquello de los hipertextos y la facilidad de ir saltando de un lugar a
otro, obliga a que el periodismo sea más activo, como son los lectores del ciberespacio.
Por lo pronto,
los periodistas que intentamos tener vigencia en la siguiente ola tecnológica debemos olvidarnos del
concepto "lector" para incorporar el concepto
"usuario" y definir así a quienes brindamos nuestros servicios. Y en
ese marco, los periodistas de la prensa, por primera vez están compitiendo con
los de la radio y de la televisión en cuestión de oportunidad y tiempo real.
Como resultado
de la vorágine de la tecnología y su consecuencia: la globalización, los
periodistas vamos a tener que permanecer en un proceso de adaptación, tal como
a lo largo de la historia ha ocurrido.
La diferencia, incluso con respecto a lo vivido en los últimos 40 años, radica
en que cada día que pasa los cambios tecnológicos se producen con mayor
rapidez, arrastrándonos a una nueva adaptación.
Pero volvamos la
mirada hacia atrás y recordemos hechos, fechas y actores del tándem periodismo
- tecnología, para comprender y prever el futuro:
La tecnología
gráfica irrumpió, para el mundo occidental, a finales de la Edad Media. Las
matrices xilográficas que dieron origen a los libros anapistográficos cedieron
el paso a los tipos móviles de Johannes Gutemberg.
Una de las
primeras y principales consecuencias de tal avance fue el permitir al hombre
liberarse de lo local y lo inmediato.
Casi a la par de
la invención de la imprenta con sus tipos metálicos móviles, Tomasso Finiguerra
obtuvo un grabado calcográfico. Este proceso, inverso al xilográfico, a lo
largo de su historia se obtuvo a fuerza de buril o por la acción química sobre
el metal.
La revolución
industrial permitió la aplicación del vapor a la impresión y con ello Friedrich
Koening varió el sistema tradicional de plano contra plano de Charles Stanhope,
convirtiéndolo en el sistema de plano contra cilindro. Velocidad e impresión
simultánea de dos caras de una misma hoja, empleando papel de bobina creado por
Louis Robert, se lograron con tal avance.
Los tipos
móviles metálicos de fabricación manual, a finales del siglo XIX superaron su
sistema de fabricación con la linotipia, máquina inventada por Otto
Mergenthaler (1884). Para efectos de composición, los tipos móviles comenzaron
a generar los lingotes que aligeraron el trabajo de los impresores.
La fotografía
puso fin a la era del grabado, aportando una nueva visión del mundo, la de una
imagen precisa y real, sin intermediarios. Actualmente y en especial desde
el Mundial de Fútbol Francia 98, la
fotografía digital desplazó a la convencional del film.
Firmin Gillot al
inventar el método de reproducir los dibujos a pluma dio origen a los
fotograbados, antes que se empezara a utilizar la intermediación de una trama
entre el objetivo de la cámara y la imagen, para capturar los mediotonos. El
proceso fotomecánico sirvió para un nuevo cambio. La litografía cedió el paso
al offset.
La introducción
de la electrónica, dando origen a la fotocomposición, en un primer momento con
el objetivo de confeccionar directamente películas transparentes exigidas por
el offset, avanzó, con el empleo del tubo catódico, a la fotocomposición
puramente electrónica.
Los ordenadores
han añadido su cuota de variabilidad a todo el conjunto de procedimientos que
en materia gráfica requiere el periodismo.
Otra tecnología,
las telecomunicaciones, aportaron su nivel de influencia en el periodismo. El
telégrafo en su momento modificó la forma de transmitir informaciones. Ya no
eran necesarias las palomas mensajeras que empleó la primera Agencia Noticiosa
para hacer conocer los sucesos de un punto en otro lugar.
La electricidad,
el electromagnetismo, las ondas eléctricas fueron los pasos de intermedio para
que Guglielmo Marconi inventara un sistema de telegrafía sin hilos. Desde la
transmisión de Marconi en 1901, el progreso de la radio fue rápido y con él, el
periodismo ganó una nueva palestra, la del sonido. Pronto se pudo escuchar las
palabras que en directo pronunciaban los actores de las noticias. La obtención
de declaraciones básicas llegando a lugares cada vez más remoto se facilitó con el teléfono.
En 1925 John
Logie Baird abrió otro campo en las comunicaciones a distancia, cuando efectuó
la primera transmisión de una imagen humana en su taller. De allí en adelante
la televisión fue mejorando sus sistemas y pronto el periodismo ingresaba en
los hogares con un rostro definido.
Pero tanto la
radio como la televisión en sus inicios se vieron limitados para transmitir en
diferido los acontecimientos. Para ello se necesitaron las grabadoras, de audio
(1935) y de vídeo (1951) y sus versiones portátiles con el casete (1963) y el videocasete (1969).
Las
postulaciones de Marshall MacLuhan, en "La extensión del hombre"
("The Extension of Man") y
"El medio es el mensaje" ("The medium is the Massage")
sobre la "aldea global", se convierten en realidad en 1963 cuando el
satélite de comunicaciones Telstar II empequeñeció la Tierra.
La era de los
satélites de comunicaciones trastocó completamente el panorama existente antes
de ella, pues permitió que un mismo acontecimiento pudiera ser contemplado
"en directo".
Desde la época
del "piano de escritura rápida" (1823) de Karl Friedrich, al de la
máquina de escribir fabricada en serie por la Remington Small Arms Company
(1874) hubo una serie de variantes, como las que se generaron con las
aplicaciones de la electricidad, radiotransmisión o telefonía para dar origen
al télex o al facsímil, la radiofoto, la telefoto o la fotografía satelital.
La tecnología de
la informática aparece en Cambridge donde un grupo de científicos operó el
primer ordenador (1930). Era un gigante adminículo, precursor del ENAC presentado el 15 de
febrero de 1946 y, que se considera como el punto de partida de la primera
generación de ordenadores.
Esta generación
basada en válvulas ha quedado en la prehistoria con la presencia de la
generación "N" de PC´s dotada de hardware, software y periféricos cada vez más poderosos.
La tecnología de
la informática nos llevó en forma rauda a las autopistas de la información, a
la red de redes y a todo lo que ello implica, como globalización de la
información.
De esta forma la
tecnología ha influido en el desarrollo del periodismo.
En Arequipa,
concretamente, los avances tecnológicos empezaron a comienzos de 1825 (8 de
enero) cuando se publicó el primer periódico "La Primavera de Arequipa o
mañanas de su Independencia", bajo la dirección del capitán Andrés Negrón.
Su publicación se hizo en la primera imprenta que funcionó en Arequipa y que
fabricó Jacinto Ibañez en 1821. Hasta antes de ese avance tecnológico las
noticias, especialmete de ultramar llegaban en curiosas relaciones manuscritas,
algunas de las cuales forman parte del archivo epistolar de los primeros
obispos de Arequipa.
Aunque "El
Telégrafo" fue el primer diario de Arequipa (1877), es "El
Deber", diario católico fundado en 1891, el que introduce los avances
tecnológicos de su época. Primero lo hizo empleando una prensa
"Rahoe" y luego otra de la fábrica J. Votron de París antes de
emplear una rotoplana "Dúplex" (1924) . El Deber fue el primer
periódico arequipeño con contar con servicios noticiosos por cable y telégrafo.
La publicación
de "El Pueblo" en 1905 aporta el uso de la linotipia y la rotoplana.
Años después, los fotograbados
reemplazan paulatinamente a las xilografías. Este diario es el primero
en ser "voceado" por canillitas. Con respecto a la linotipia hay que
destacar que en la Exposición de Arequipa (28 de julio de 1891), siete años
después que el relojero Ottmar Mergenthaler creara su prototipo, se presentó
una máquina cajista de composición. El artefacto mereción medalla de oro. Fue
construido por Isidoro F. Quintana y Hermilio M. Vizcarra. La descripción de
ésta corresponde a un sistema de linotipia. (Caja triangular cerrada e
inclinada en la parte superior; termina en un canal de fierro que da paso al
tipo, y cae verticalmente al componedor, montado em una rosca con una´pequeña
rueda con manilla, destinada a darle el movimiento a voluntad a medida que los
tipos se colocan en el componedor. A manera de teclado lleva cuatro hileras de
pequeños vástagos, que oprimidos, suavemente hacen descender de la caja al cimponedor
el tipo o signo a que cada una corresponde.)
Con la aparición
de Correo, ya en este siglo, bajo la dirección de José González Málaga, se
sustituye el sistema de impresión. Se emplea la rotativa.
El Pueblo,
dirigido por Pedro Morales Blondet, en la década del 70 introduce el
"Photom" en la composición, la impresión offset, la radiofoto y la
telefoto. Tanto el servicio de radiofoto y telefoto fue brindado por la United
Press International.
La impresión
offset de colores, el empleo de la informática para la composición y la
diagramación, la digitalización de imágenes, la recepción de las informaciones
de una agencia noticiosa en ordenador y vía satélite se concreta con la
publicación de "Arequipa al día" en febrero de 1991 (28), bajo la
dirección de Carlos Meneses. Este diario será el primero en Arequipa con contar
con un Libro de Estilo. Este fue preparado por Dante Zegarra López en
colaboración con Luis Zegarra Calderón y Miguel Zegarra López.
En agosto de
1995 (14), este mismo diario emplea, por primera vez en Arequipa, una máquina
fotográfica digital y en 1996 concreta el empleo de Internet para la publicación de un diario digital,
bajo la dirección de Dante Zegarra López. Simultáneamente en esfuerzo personal,
Miguel Damiani, websmaster de AQPLink difunde noticias de Arequipa en Internet.
La telemática ha
permitido que un diario capitalino (La República) imprima la edición preparada
en Lima.
Aunque en
noviembre de 1930 Radio Landa, se convierte en la pionera de la radiodifusión
arequipeña, es Radio Arequipa, la primera estación en transmitir noticias. Era
la época de la guerra y los primeros periodistas radiales fueron Hugo Hidalgo
Ocharán y Carlos Hernán Cornejo.
La historia de
la televisión empieza con Gustavo Quintanilla Paulet y Surperuana Canal 2 TV,
para luego continuar con Continental Canal 6 TV. Ambas estaciones dotaron, casi
simultáneamente, espacios informativos, pero Continental fue la primera
estación que organizó un Departamento de Prensa. Este lo integraron Alfredo Bernal Murillo y Dante Zegarra.
La difusión de
informaciones de Arequipa para el mundo se produjo en la década del 40. El
corresponsal de la United Press, Edilberto Zegarra Ballón cursaba sus despachos
por correo y telégrafo, al igual que su sucesor Juan José Barriga González.
En la década del
50, para esta labor el corresponsal de United Press International, Luis Zegarra
Calderón, utilizaba los servicios del
cable y teléfono. En 1955 (diciembre) por primera vez se transmite una noticia
de Arequipa, vía teléfono a Nueva York.
En la década del
70, los corresponsales de ESI Perú y Andina (Pablo del Carpio, Raúl Llanos y Dante Zegarra) lo hicieron mediante
el télex y Gilberto Luján de El Comercio, mediante el radioteléfono.
En la década del
90, el corresponsal de la Agencia Reuter y del diario Expreso de Lima, Miguel
Zegarra López, se convierte en el primero en realizar sus despachos
informativos y gráficos vía correo electrónico.

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