Dante E. Zegarra López
Dos jóvenes menores de treinta años fueron los
encargados de dar a conocer al pueblo de Arequipa la noticia del fallecimiento
del Papa Juan Pablo II.
Uno lo hizo, desde el ambón del presbiterio en
la Catedral
y otro tañendo las campanas del primer templo arequipeño.
Ambos lo hicieron casi veinte minutos después
de que la noticiera del fallecimiento de Juan Pablo II se produjera en el
Vaticano.
Resultó simbólico el hecho que fueran jóvenes
los que tuvieran el encargo de propalar en Arequipa la infausta noticia. Para
nadie es desconocido que el difunto pontífice tuvo una marcada predilección por
los jóvenes. De ellos decía “con sus dones de
inteligencia y corazón, representan el futuro del mundo". "Pero
también llevan las marcas de una humanidad que con demasiada frecuencia no
conoce la paz, o la justicia”.
Omar Huanacini Aco, seminarista de quinto año,
de 29 años de edad, al presidir el rezo del Santo Rosario por la muerte del
Santo Padre, informó de la noticia a los fieles que se reunieron para orar en la Catedral arequipeña
Desde el campanario de la Catedral Miguel Córdova
Cáceres, un jefe Scout del Grupo de La Merced , durante casi una hora dobló las campanas,
expresando en el lenguaje propio de ellas que el Papa había muerto.
Desde lo ocho años, aprendió a tañer las
campanas, teniendo como sus maestros a los sacristanes de la Catedral , especialmente
el recordado Fernando Sánchez.
Como un heraldo de la antigüedad, Miguel
Córdova se ha encargado de tocar las campanas de la catedral anunciando la
muerte del arzobispo Fernando Vargas Ruiz de Somocursio, de los cardenales del
Perú, monseñores Juan Landázuri Ricketts y Augusto Vargas Alzadora y de los
canónigos Manuel Butrón, Efraín Romaña Osnayo.
En cada caso los anuncios se hacen de
diferente forma.
Los toques de la campana mayor son 50 cuando
se trata de un Obispo, 20 para el caso de la muerte del Deán, y 10 en caso de
canónigos.
Ayer Miguel Córdova tocó cien tremores, 100
dobles y finalmente tocó a plegarias, anunciando al pueblo de Dios en Arequipa,
la muerte del Papa Juan Pablo II.
Las campanas
El campanario de la Catedral tiene seis
campanas. La más antigua, dedicada a San José y fundida por Tomas Melcy antes
de 1800 se encuentra en el arco que da hacia la Plaza de Armas.
Al centro se encuentra la campana Mayor, cuyo
peso es de 500 quintales, es decir alrededor de dos toneladas métricas. Esta
campana fue fundida el 28 de enero de 1841 por Manuel Cuba bajo la dirección de
Jacinto Ibáñez.
Hacia el norte se encuentra una de las
llamadas campanas medianas realizada en la Fundición del Águila en 1907.
Mirando hacia la Pontezuela se ubican
dos campanas medianas, realizada también por la fundición El Águila en 1907 y
otra por Cayetano Arenas en 1899 llamada San José Nº 2.
Hacia el lado de San Agustín está una campana
dedicada a la Virgen
de Copacabana y fundida en 1813.
Su lenguaje:
Hay tres toques fundamentales para anunciar
defunciones. Estos son los tremores, los dobles y las plegarias.
Los tremores en la Catedral comienzan con
doce toques de la campana mediana que da al interior del templo y luego un
toque de cada una de las seis campanas.
Los dobles son toques seguidos de la Campana Mayor , espaciados en el
lapso que desaparece su sonido, esto es aproximadamente cada diez segundos.
Las plegarias, en la Catedral consisten en dos
toques de la campana mediana que da al interior del templo, seguidos de un
toque de la campana mediana que da hacia la Pontezuela , dos de la Campana San José Nº 2 y
finalmente un toque de la campana San José, que da hacia la Plaza de Armas.
(Arequipa al día 2 abril 2005)

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