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Dante E. Zegarra López, Periodista, Arequipa (Perú)

viernes, febrero 02, 2018

Cuestionan política exterior del Perú


Cuestionan política exterior del Perú

Perú una zona franca o enclave

Dante E. Zegarra López
AREQUIPA AL DIA
Mientras el presidente Alberto Fujimori desarrollaba su periplo por el sudeste asiático, las inquietudes en torno a la real importancia de esos viajes anuales se agitaron y se comenzó a cuestionar la política exterior peruana.
Un académico limeño, con doctorados en "Historia de la Ideas Políticas" y en "Ciencia Política", obtenidos en Europa, ha roto los fuegos. Ha planteado, la posibilidad, que el Perú se convierta en una zona franca o un enclave de los países del sudeste asiático.
El doctor Juan Mariátegui, familiar de todos los Mariátegui que en un extremo o en otro han desarrollado una activa vida política en el Perú, ha sido contundente al afirmar, en diálogo con AREQUIPA AL DIA, que "con donaciones no se construye un país".
La alusión directa está referida a los anuncios de donativos para el Perú, provenientes del Japón y de los países del sudeste asiático. Según el doctor Mariátegui, las donaciones son hechos coyunturales y sólo sirven a las pretensiones políticas del gobernante.
Para este académico, que ayer concluyó el dictado de un curso de postgrado sobre Política Internacional en la Universidad Católica Santa María, "El Perú no es un país prioritario para la política exterior japonesa".
Según ‚l, el socio preferencial del Japón, indudablemente, son los Estados Unidos. Al respecto, explica, que en lo político, Japón y su democracia son hechura de los Estados Unidos y en lo económico son socios, pues al fin y al cabo, cien mil millones de dólares vende Japón en el mercado estadounidense contra la mitad de esa suma que los Estados Unidos comercia en el mercado japonés.
Para el doctor Mariátegui, el presidente Fujimori ha creado un espejismo sobre el Japón y los países del sudeste asi tico. Puntualiza que, desde la d‚cada del 90, la ayuda de esos países sólo se ha traducido en cooperación técnica y donaciones y no en inversión.
Armado de un buen número de sus trece libros de análisis político, el doctor Juan Mariátegui recuerda que "en el caso de la deuda externa, Japón no ha dado nada aparte de lo señalado en el Fondo Monetario Internacional, porque al fin y al cabo sigue las directivas de su socio, los Estados Unidos".
Por otro lado, exhibiendo estadísticas, puntualiza que ni siquiera en cuanto a cooperación técnica el Perú es prioritario para el Japón: "El 90 por ciento de la cooperación técnica del Japón es para el sudeste asiático y el 10% restante para los demás países del mundo, entre ellos el Perú".
"La presencia de un descendiente japonés, en la primera magistratura del Perú, no ha originado un plan Marshall, como el que le dio Estados Unidos al Japón después de la guerra", afirma el doctor Mariátegui.
Ante esa actitud, el presidente "Fujimori lo que hace es tocar las puertas del Japón, desde hace siete años, sin que se las abran, al extremo que aún no hemos entrado en el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que ya lo integran países latinoamericanos como México y Chile". Estos mismos países también son beneficiarios del Tratado de Libre Comercio que ha implantado Estados Unidos.
Pocos días después de la visita oficial que realizó el presidente Fujimori a Filipinas, ese país anunció que los ingresos a la APEC quedar n diferidos, por lo menos, hasta 1998. Se esperaba que la APEC admitiera a nuevos miembros a partir de los últimos días de este año. Según las noticias vinculadas a la gira el presidente peruano, todos los países visitados por él anunciaron su apoyo incondicional para que el Perú sea admitido como socio del Foro Asia Pacífico.
La insistencia del presidente Alberto Fujimori, en tener puesta su vista en el oriente, tendría dos explicaciones, según el doctor Juan Mariátegui.
La primera que "en su concepción está pensando en convertir al Perú en una zona franca para los capitales orientales y, sin embargo, ellos no muestran interés".
La segunda explicación estaría vinculada a una tendencia étnica: "su corazón y su mente está en el Asia". La explicación étnica se ve reforzada, de acuerdo al planteamiento del doctor Juan Mariátegui, con la decisión del primer gobernador de ascendencia china, recientemente electo, en el estado de Washington (Estados Unidos). El ha anunciado que viajar  a China y Taiwan".
En el caso del presidente Alberto Fujimori, como trae a la memoria el doctor Mariátegui, "a los cuatro días de ser electo fue a tocar las puertas de Japón, donde fue  recibido por un ministro".
En su an lisis, el doctor Juan Mariátegui, afirma que "La política exterior de Fujimori es reacia al Pacto Andino. Recordemos que el Perú se ha autoseparado" apunta.
Acostumbrado a la síntesis, el doctor Mariátegui remarca que: "La política exterior peruana es sui géneris" y que "Fujimori no tiene una política integracionista con los países de América".
Abundando en detalles remarca que el presidente peruano "Tiene horizontes lejanos en cuanto a integración, m s que horizontes cercanos. Esto lo demostró el año pasado cuando luego de 13 o 14 días de viaje por Japón y China hizo una escala en Cartagena de Indias donde se realizaba la 5¦ Cumbre Iberoamericana". Sin embargo, puntualiza el doctor Mariátegui, la frustración de Fujimori ante la poca atención del capital japonés quedó patente cuando, con poco tacto criticó, en China, a los empresarios japoneses, calificándolos de conservadores.
Apoyando sus apreciaciones en los hechos, el doctor Mariátegui indica que "en la 6ª Cumbre Iberoamericana, en Santiago, Fujimori habló de economía como un técnico del FMI, mientras los demás presidentes hablaban de integración y de acelerar el proceso político democrático. Luego, al día siguiente, se fue de viaje por el sudeste asiático", raid oficial que el sábado concluyó.
Respecto al r‚gimen político del país, la apreciación del politólogo Juan Mariátegui es que, Fujimori quiso establecer una democracia similar a la del sudeste asiático, basada, en lo político, en una democracia verticalista: con poco respeto a los derechos humanos, sin equilibrio de poderes y, en lo económico, en el liberalismo.
La diferencia, remarca el doctor Mariátegui, es que el liberalismo de los países del sudeste asiático es exportador, mientras el del Perú es importador.
Añade que el presidente Fujimori tiene una concepción asiática del gobierno, al estilo el extremo oriente, que no corresponde a la concepción occidental ni tampoco a la japonesa, instaurada por los Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial.
"Quizás en ello está la razón por la que el empresariado japonés se resiste a invertir en el Perú: Ellos ven que la democracia del Perú es un castillo de naipes, porque está basada en la figura de Fujimori, y que cuando ‚l se vaya, caer  esa democracia sui géneris, acostumbrada a salvar el espectáculo con mecanismos psicosociales".
Hablando sobre el modelo económico puesto en vigencia por el ingeniero Fujimori, el doctor Mariátegui apunta que "Ya comenzó el Fujicrack, pues el modelo, es como un callejón sin salida que nos ha puesto frente al muro. Situación ésta, que tiene como nombre: crisis económica".
Según el doctor Mariátegui, ex-catedrático de las universidades de Grenoble (Francia), Argel (Argelia) y Abidjan (Costa de Marfil), "Somos aplicadores de políticas impuestas. No creo que un país occidental del primer mundo, ni Japón, vaya a aplicar en su territorio un modelo neoliberal como se desarrolla en el Perú. Por ejemplo, Estados Unidos basa su política económica en el proteccionismo".
Recuerda, además, que el neoliberalismo surgió con Margaret Tatcher y alcanzó su mayor auge con Ronald Reagan, quienes necesitaban gobernantes producto de las circunstancias, a quienes pudieran exigirles el pago de la deuda, a cualquier precio.
Dadas las circunstancias, señala el doctor Mariátegui, el modelo neoliberal dependiente no va a salvar la situación económica sino la va a agravar, pues "el neoliberalismo ha sido concebido para que los países pobres paguen la deuda externa".
Además, remarca, "el neoliberalismo que se practica en el Perú, es dependiente y anti-exportador y ni siquiera favorecer  a la formación de una burguesía nacional".
Personalmente, este politólogo se inscribe como alguien que está por el capitalismo donde la burguesía nacional mande, considera que "la burguesía peruana debe abrir los ojos, para no convertirse en un yanacón de la inversión exterior", y que de mantener la posición que tiene actualmente "le dar  dividendos, temporalmente, pero la historia dirá como fueron absorbidos".
Sobre el país se cierne, según el doctor Juan Mariátegui, un grave peligro porque: "El Estado neoliberal puede ser aprovechado por el narcotráfico. Este peligro se concretar  si las aduanas pasasen a manos privadas".
Estima que la política neoliberal, es impuesta a los países del Tercer Mundo para desarmarlos y que, las potencias económicas practican la sentencia "Has lo que yo digo, pero no lo que yo hago". Remarca también que las grandes potencias, son exportadoras de doctrinas que ellas no aplican dentro de sus territorios.
Generalizando alguna de sus apreciaciones, el doctor Juan Mariátegui dice que los gobiernos a cargo de hijos de inmigrantes de primera generación, como los de Menen (Argentina), Fujimori (Perú) y Bucaram (Ecuador), sólo sirven para desnacionalizar lo que fue construido por otros y que con ello, pretenden hacer creer, la ficción, de que se está creando riqueza.
Con cierta ironía apunta también, como sui géneris, la inusitada vocación política que ha surgido, últimamente, entre los descendientes asiáticos. Antes sólo les interesaba ocuparse de su chifa o su bodeguita, remarca.
Sin ningún remilgo, el doctor Mariátegui habla también sobre la personalidad del presidente Fujimori: "Yo para entender a Fujimori, no lo entiendo ni por la historia, ni por la lógica ni por la cultura peruana ni andina. Yo lo entiendo por la historia del Japón, por el budismo Zen y por el teatro No, japonés".
Aclarando su síntesis, el politólogo limeño indica que los rasgos de la personalidad y las actitudes del presidente Fujimori, se entienden mejor por la historia del expansionismo japonés, así como la filosofía Zen que predica vivir el instante como los niños y, por la característica del teatro No: la simulación.
Puntualizando aún m s, afirma que (Fujimori) desconcierta a todos, incluso a su servicio de inteligencia; que su concepto de la ironía es oriental y, que por lo desconcertante gusta. Sobre la simulación oriental dice que es diferente a la nacional; el personaje cambia a cada instante en la oriental; tiene m s arte que el personaje peruano, que es m s ingenuo, m s puro.
Añade que, con un concepto de simulación, de lógica oriental, ha prolongado m s al personaje que le gusta representar, el del pragmático.
Según el doctor Mariátegui, (Fujimori) más que intuitivo es instintivo. El intuitivo revela un desarrollo espiritual, el instintivo vive cada minuto.
En su análisis, hablando con total desenfado y casi telegráficamente apunta: "el peruano está adormecido y, lo peor es que se ha auto-controlado; se ha olvidado de protestar. El hambre es el  que hace que la gente se haga m s resignada. Ahora tenemos un peruano blandito. El peruano ha tenido demasiado legañas y como el oso, después de un largo invierno, ya ha comenzado a despertar".
Explica que el adormecimiento se produjo porque "el pueblo peruano se ha aferrado demasiado a su último caudillo; no quiere equivocarse m s y no quiere admitir que se ha equivocado nuevamente".